Todo aquel que haya nacido en Canillas sabe que el 73 es algo más que un autobús. El grupo Porretas cantaba que cuando Dios creó Hortaleza “el Metro se le olvidó”, y en aquellos años el 73 era la única conexión del barrio con la ciudad en transporte público. Entonces una estrecha y agujereada Carretera de Canillas nos unía frágilmente, como un cordón umbilical, a Madrid, y para la mayoría del vecindario subir a este autobús suponía emprender una expedición hacia la civilización.
El 73, para los de Canillas, era algo nuestro cuando nada nos pertenecía. Desde 1974 parte desde Diego de León rumbo Canillas, y aunque también es un autobús de La Prospe, barrio que atraviesa por López de Hoyos, cuando cruza Arturo Soria se convierte en parte del paisaje del barrio, porque a bordo va siempre su paisanaje.
Para el vecindario de Villa Rosa, donde finalizaba la línea en los años ochenta, los autobuses rojos del 73 formaban algo parecido a un convoy humanitario que te llevaba al trabajo, al médico, al colegio o de compras. Sus conductores, que abrevaban en el bar Cervigón de la calle Mota del Cuervo al final de la ruta, eran rostros conocidos para el barrio.
El crecimiento del barrio provocó el estirón de la línea hasta la nueva calle Silvano, llegando hasta los confines del distrito en los últimos años al terminar su ruta sobre la M-40. Ahora, el 73 se ha salido del todo, y desde la semana pasada prolonga su recorrido allende Hortaleza, llegando a los recintos feriales de IFEMA, que ya pertenecen al vecino distrito de Barajas.
El cambio ha quedado reflejado en el cartel de la línea, donde se ha caído el nombre de Canillas y ahora se lee “Diego de León – Feria de Madrid”. El 73 transportó el año pasado a 1.659.000 viajeros, muchos vecinos y vecinas del barrio, que desde hace tiempo reclaman que se mejore la frecuencia del único autobús que circula por la Carretera de Canillas.
A finales de 2017, el Pleno de Hortaleza aprobó una proposición del PSOE para solicitar que la frecuencia del 73 no superara los diez minutos. Hace una década, en 2009, el Pleno del distrito ya había aprobado una proposición similar con el apoyo unánime de todos los grupos.
Podria llegar hasta Valdebebas, los vecinos estarían muy agradecidos