En Hortaleza, la pandemia del coronavirus irrumpió provocando un doloroso silencio en el hogar de Marcelo Peralta, vecino de origen argentino y músico de jazz al que habíamos disfrutado en directo y sin salir del barrio gracias a los Encuentros Culturales Portugalete, esa maravillosa iniciativa vecinal que organiza conciertos gratuitos todos los meses en el centro cultural Carril del Conde de Canillas.
Marcelo Peralta, de 59 años, falleció el 10 de marzo en el hospital Ramón y Cajal tras haber sido ingresado cinco días antes por una neumonía bilateral. Su fallecimiento sobrecogió en el barrio, cuando todavía no se había declarado el estado de alarma, porque nos abría los ojos antes la virulencia de la pandemia. Su mujer Mariana, y sus tres hijos, Naima, Ramiro y Luz, no pudieron despedirse: se encontraban aislados en casa por ser sospechosos de contagio.
Un luto en cuarentena, aunque la gran familia del jazz les ha mandado afecto desde todas las latitudes del planeta. El 30 de abril, con motivo del Día Internacional del Jazz, el pianista estadounidense Herbie Hancock, leyenda viva de este género musical, hizo de maestro de ceremonias de una noche de actuaciones retransmitidas por internet. El gran pianista quiso recordar a los músicos “queridos y talentosos” que se ha llevado la pandemia, y entre ellos pronunció el nombre de Marcelo Peralta. Un homenaje que reconfortó a su familia “entre tanta tristeza e impotencia vividas”, relata Mariana.
LUTO EN PHOTOLEZA
Pedro Herguedas, un enamorado de Hortaleza que nunca quiso salir del barrio, falleció en abril por coronavirus en el lejano Hospital de Almansa, en la provincia de Albacete. Militar de profesión, en la reserva desde hacía años, Pedro era teniente general del Ejército español.
Fue jefe de la Fuerza de Acción Rápida del Ejército de Tierra y anteriormente jefe de la brigada de Infantería Ligera Aerotransportable “Galicia VII” y, entre otras muchas misiones, dirigió la misión internacional SPABRI XI en Bosnia-Herzegovina.
Este hombre absolutamente entregado a su familia, a su esposa Carmen y a sus hijos, con una educación exquisita, irradiaba paz y tranquilidad, como le recuerdan sus compañeros de la asociación de fotografía Photoleza, de la que Pedro era miembro fundador. Un colectivo que durante estas semanas de confinamiento también ha sufrido la pérdida de Julio García Esteban, colaborador de este periódico, tras una larga enfermedad.
LA HUMILDAD DE FÉLIX
Tras las frías y espeluznantes cifras de fallecidos por coronavirus se esconden personas como Félix González, uno de esos vecinos solidarios que hicieron el barrio que hoy conocemos. Nació hace 79 años en la pequeña localidad segoviana de Bernardos, aunque emigró a Madrid a finales de los cincuenta. Voluntario de Cáritas, “daba hasta lo que no tenía por ver a la gente sonreír”, como le recuerdan en el centro de mayores El Henar, en la UVA de Hortaleza.
“Era una persona genial, amable, educada y humilde que amaba a su familia y amigos, y un alumno buenísimo”, subraya su profesora de Informática, Miriam Maqueda, que quería recordarle en este periódico. Un homenaje que lo es también para tantos otros vecinos y vecinas víctimas de la pandemia.
Hola .buenas tardes, simplemente quiero daros las gracias por este bonito y sencillo recuerdo que habéis tenido con estas tres personas.
Soy hermano de Felix, y ninguno de nuestra familia ha podido tener de cerca una simple mirada de despedida con quien efectivamente lo doy todo por los demás y con ello disfrutaba. ¡¡ que pena, la mayor de las penas que le quedan a uno !!. Adiós amigos, adiós hermano Felix, Tu hermano Paco no te olvidará!!
Querido hermano Félix, has sido siempre nuestro apoyo y dónde se podía recurrir ante cualquier problema. Tu generosidad, alegría, tu hacer el bien a todos, tu estar siempre preparado para escuchar,
Solucionar, reconfortar cualquier problema que tuviéramos, tu entrega a los demás y tu forma de ser, nos ha servido para seguir creciendo en nuestras vidas. Te queremos con todo el alma y siempre estarás en nuestros recuerdos y corazón, porque eres parte de nuestras vidas.
Mi tio Felix hera una gran persona no hablaba por no ofender y me consta que hizo una gran labor social en Caritas ahora esta como en tantas ocasiones con su cuñada mi madre Mari Pili también fallecida por esta terrible pandemia.
Descansen en paz
Buenas tardes a todos. Antes que nada quiero darle el pesame a los familiares que han perdido seres queridos . Quiero agradecer en particular el recordatorio hecho a Don Pedro Herguedas Carpio a quien tuve la suerte y el orgullo de conocer a tan buena persona ,con una educacion y respeto excelente. Mi hija y yo hemos cuidado de su madre y conocemos a toda la familia por cierto tan excelentes como el querido y respetado Pedro. Es una pena muy grande su perdida. Siempre nos escribiamos en fechas especiales como navidades, cumpleaños ,etc. Cuando me entere que se habia contagiado le escribi no me imagine que estaba tan mal. Nos duele su partida. Hasta siempre Pedro.
En inicio BENDECIR, FELICITAR y ELOGIAR a quien proceda por esta iniciativa.
Soy Tomás hermano de Pedro, Dios me concedió dos grandes premios, tener los mismos padres y ser su hermano, con sus ejemplos forjaron mi vida profesional y social.
Tanto los padres como el hermano me «forzaron» a ser tal cual (la vida social y castrense obliga a ello) (de tal palo…).Sin por ello sufrirlo en demasía por naturaleza de sangre. Entiéndase ello al ser padre e hijos militares profesionales.
Por parte de mi padre, sus ya encanecidas amistades me anegaron más de una vez los ojos al contarme sus antiguas vivencias.
Por parte de Pedro en cada ascenso profesional recibía felicitaciones de compañeros de armas suyos y allegados míos, por amistad y reconocimiento (salúdale de mi parte,,,).
Tres hijos en su haber a cual mejores, esposa a imitar por entrega total a la familia.
Me despido con niebla en los ojos.
QUE DIOS OS BENDIGA.