Cada día, la actualidad se acerca a nosotras con cientos de noticias que, a falta de una expresión mejor, te dejan los pelos de punta. Muchas de ellas por resultar del todo surrealistas o incomprensibles para la mayoría de las ciudadanas y ciudadanos de a pie.
Por segunda vez en pocos meses, cientos de miles de personas han salido a las calles de Madrid para demandar una sanidad pública de calidad. La respuesta de la Consejería de Sanidad y de la Comunidad de Madrid –responsables de la gestión del sistema de sanidad público de la región– es decir que son “una minoría politizada”.
La manifestación del pasado 12 de febrero reunió a 250.000 personas según la Delegación de Gobierno y a un millón según la organización convocante, a saber, la Coordinadora de Barrios y Pueblos de Madrid. ¿Es esto una minoría? ¿Y todas esas personas votan al mismo partido político? No parece posible. Si hay algo que está dejando clara la lucha en defensa de la sanidad pública en Madrid es que, ya seas de izquierdas o de derechas, todo el mundo quiere tener un médico de familia o un pediatra que lo atienda como es debido, que lo escuche y que le dedique el tiempo que sea necesario para poder tratar su dolencia.
La respuesta de la Comunidad de Madrid ante las demandas de los profesionales sanitarios es decir que tenemos “la mejor sanidad pública de España”. Sin embargo, los datos no avalan esta afirmación, que no por repetirla tantas veces va a terminar siendo cierta. Por citar solo un dato, Madrid es la comunidad autónoma que menos invierte en Atención Primaria (base de todo el sistema público sanitario), a pesar de ser la que posee mayor producto interior bruto.
Madrid es la comunidad autónoma que menos invierte en Atención Primaria (11,3%), a pesar de ser la que posee mayor producto interior bruto
En total invierte un 11,3% del presupuesto (muy por debajo del 25% aconsejado por la Organización Mundial de la Salud para este nivel asistencial), lo que supone un gasto de 1.446,13 euros por habitante. Si la presidenta Isabel Díaz Ayuso es capaz de conseguir mejor servicio invirtiendo menos, está obrando un milagro mejor que el de los panes y los peces.
Si esta afirmación es cierta, ¿por qué somos la comunidad autónoma con el porcentaje más alto de contratación de seguros sanitarios privados? En la Comunidad de Madrid, que posee una población de más de 6,5 millones de habitantes, tienen contratado un seguro privado de salud 2,43 millones de personas, lo que supone un 39% de la población madrileña.
Si la afirmación de la presidenta de la Comunidad es cierta, si la Atención Primaria en particular y la sanidad pública madrileña en general son las mejores de España, ¿qué necesidad tiene este 39% de madrileños y madrileñas de contratar un seguro privado?
En la Comunidad de Madrid, con más de 6,5 millones de habitantes, tienen contratado un seguro privado de salud 2,43 millones de personas
También se afirma que Madrid es la comunidad autónoma con mayor cobertura horaria en Atención Primaria. Este argumento hace referencia al horario de apertura de los centros de salud, que en Madrid abren de lunes a viernes a las ocho de la mañana y cierran a las nueve de la noche.
A ver, es cierto que este es el horario de apertura de los centros, pero en la práctica no se puede dar un servicio de atención a los pacientes porque no hay profesionales suficientes para cubrir este horario y los pocos que hay deben cubrir los huecos y hacerse cargo de esos pacientes.
En total, hay un millón de personas sin médico de familia asignado y 200.000 niños sin pediatra en Madrid, ubicándose el mayor porcentaje de plazas sin cubrir en el turno de tarde. Por tanto, ¿de qué te sirve que el centro esté abierto si no te pueden atender?
Sin duda, todas estas incongruencias en el discurso de los responsables de la calidad de nuestro sistema sanitario público te ponen los pelos de punta. En mayo tenemos una nueva oportunidad de expresar nuestro malestar en las urnas y no solo en las calles. Esperemos que el resultado no nos ponga los pelos de punta.
