En la fotografía superior, que se exhibe en la exposición ‘Hortaleza Periódico Vecinal, una década en imágenes’ (hasta el viernes 14 de junio en el Silo de Hortaleza), podemos ver cómo era antes el edificio que alberga ahora a la biblioteca Huerta de la Salud.
Fue construido a principios del siglo XX y en él se guardaban herramientas y máquinas para trabajar el campo, e incluso animales, por eso, como podemos apreciar, tenía una entrada de establo en una de sus esquinas. También alojaba talleres.
Pertenecía a la Quinta de Huerta de la Salud, propiedad del notario Pedro Tobar, que contaba con el Silo, al fondo de la instantánea, como su elemento más característico, y que se dedicaba a la compra-venta de animales selectos y a la venta de piensos para su alimentación.
Junto al granero y el mirador o palomar, y numerosas casas que configuraban hasta calles, algunas también en la imagen, ambas construcciones conformaron una especie de poblado que sobrevivió hasta bien entrado el siglo XX, marcando, por su aire fantasmagórico, la infancia de varias generaciones de hortalinos.
En la planta superior de la casa, que proporcionó el nombre con que se la conocía de ‘El corredor’, dormían personas empleadas en la quinta. La fotografía está tomada hacia 1977. Pese a que se observa abandono –la quinta hacía tiempo que había dejado de funcionar como negocio agropecuario-, vivían todavía en su interior familias.
Destacan el cubo moderno y la fregona colgando, la antena de televisión y al fondo unas cuidadas macetas. En el horizonte aparece parte de la urbanización Virgen de la Salud, construida a mediados de los años setenta.
Tras su parcial derribo a finales de los años setenta y años de espera, se levantó un nuevo edificio respetando en parte la estructura del anterior. Primero fue utilizado para desarrollar talleres del centro cultural Huerta de la Salud y, desde 1995, es sede de la biblioteca Huerta de la Salud.
Los aires de campo y labranza fueron sustituidos por aires de cultura; y donde antes había hogares, ahora hay salas de lectura. La fotografía es del 5 de junio de 2019. Las dos construcciones pertenecen ahora al parque llamado precisamente Huerta de la Salud. Al Silo, reformado también para la cultura en dos ocasiones, le corona desde el año 2000 uno de los mejores miradores de Madrid.
Buenas tardes! Los recuerdos que tengo de este lugar son entrañable, jugaba con la hija de un señor que era.pastor de ovejas y trabajaba y vivía en ese edificio.
El silo y el parque actual han formado y forman parte de nuestra vida y la.de nuestros hijos y sobrinos, que actualmente lo disfrutan de otra manera.
Gracias por mantener viva laoria del barrio
Bravo Juan! Gran historia y gran foto.
Estupendo artículo, uno más, de Juan Jimenez, rescatando la memoria, como herramienta para tratar de entendernos, cada uno de nosotros y colectivamente.. gracias para Juan y para el Periódico feliz aniversario.
J.L. Belinchon
Estupendo artículo de Juan Jiménez para ayudar a conocer un pasado tan próximo como ignorado. Gracias por este artículo, un trabajo más de Juan y al Periódico felicidades por ese décimo aniversario.