El pasado mes de abril, la asociación CEPA Dulce Chacón, fundada en el año 2012 y en la que participan antiguos alumnos y trabajadores, organizó una conferencia en el centro social para celebrar su 40 aniversario, con la sala abarrotada de público. Asun, de la Junta Directiva, hizo una presentación repasando la historia del barrio de la UVA y, por ende, de la que en un principio se denominó Cátedra José Antonio.
HACIENDO MEMORIA
Las UVA (unidad vecinal de absorción) de Madrid (Fuencarral, Vallecas, Villaverde, Canillejas, Pan Bendito y Hortaleza) empezaron a construirse mediante decreto en 1961, y la de nuestro distrito en 1963. En su origen, no estaba prevista la creación de la Cátedra, pero la Sección Femenina, dentro del marco de la Falange y al amparo del Movimiento Nacional, comenzó a proponer cátedras ambulantes y fijas. La Cátedra de la UVA de Hortaleza se construyó con la consideración de fija en 1965 para fomentar y difundir las ideas del Movimiento Nacional franquista.
Durante doce años, este organismo estuvo compuesto por una jefa de cátedra, una asistenta social, una doctora, una enfermera, dos instructoras y un instructor de Juventudes y Educación Física y dos profesoras de Hogar –una de Corte y Confección y otra de Labores y Trabajos Manuales–. Las enseñanzas que impartían eran formativas, sanitarias, culturales y de hogar.
MOVIMIENTO ASOCIATIVO
A partir de 1977, con la legalización de las asociaciones de vecinos y un decreto que recogía la desaparición de la Secretaría General del Movimiento, la antigua Cátedra pasó a depender del Ministerio de Cultura. Gracias a las negociaciones llevadas a cabo entre este ministerio y La Unión de Hortaleza, se produjo el nacimiento de la Escuela Popular de Hortaleza, donde se daban clases de alfabetización. Al mismo tiempo, se gestaba el futuro centro social, acordado en diciembre.
En 1978, comienza la nueva etapa que aquí se conmemora: el paso de CEAS Hortaleza a CEPA de Hortaleza y, finalmente, a CEPA Dulce Chacón.
Aunque con el tiempo han ido evolucionando, se impartían, entre otras, actividades artísticas, centro de talleres y servicios abiertos: asesoría jurídica, gabinete de psicología, asistencia social, médica y de enfermería o centro de planificación familiar.
EMOTIVO FINAL
Después de la exposición y presentación del acto, vino la parte más gratificante, quizá por lo inesperado, con la intervención de varios profesores y alumnos que fueron protagonistas de la etapa de 1978.
Los profesores reconocieron el vértigo que les supuso trabajar en un proyecto hasta entonces desconocido para ellos y los alumnos, más bien alumnas, recordando no solo los conocimientos que adquirieron,
sino la complicidad y la diferente forma de ver las cosas que siempre mantuvieron en la relación profesor-alumna.
Finalmente, conceder el mérito que se merecen a los miembros de la asociación CEPA Dulce Chacón no solo por la organización del acto, sino por conseguir reunir a personas que no se veían desde cuarenta años.
Hola, mi nombre es Joaquin Caballero, soy de Diezma, un pueblo pequeñito de Granada, en el año 1968 tenia sólo 18 años y vivia en el barrio con unos familiares, formé parte de los formadores de la Cátedra de Hortaleza como preparador de la rondalla que entonces existia, desde el año 1968 hasta 1973 que cambié de domicilio; en aquel tiempo se celebraban concursos en el parque de atracciones de Madrid en los que participaban todas las Cátedras a final del curso y todo hay que decirlo, mi grupo de rondalla quedó en primer lugar todos los años que yo los presenté. Durante aquellos años el centro fué mi casa, Esperanza era la directora, Adela asistente social, Blanca preparaba al coro, etc. Alli tuve la oportunidad de avanzar en mis estudios de música y poder terminar el grado superior de guitarra en el conservatorio de Madrid, en 1985 me trasladé a Granada como delegado de La Fraternidad Mutua de Accidentes de Trabajo, en la que comencé a trabajar en Madrid en el año 1967. Desde entonces no he tenido a ocasión de volver por ese centro, aunque ahora a mis 73 años tengo intención de hacerlo.
De paso, decir que en los comentarios del periódico se han olvidado mencionar la existencia de la actividad musical de esa época que incluía además de rondalla, coro y danza.
Un saludo a todos los componentes del nuevo centro y también a los del periódico.