Inés Sabanés, delegada de Medio Ambiente y Movilidad, presentó el pasado 29 de enero el programa de aparcamientos disuasorios al Consorcio Regional de Transportes de Madrid, del que forman parte tanto la Comunidad de Madrid como el Ministerio de Fomento (Cercanías y Radiales), por lo que las tres instituciones deberán coordinar la planificación de estas construcciones o ampliaciones, ya que afectan a ámbitos comunes de actuación.
Las localizaciones propuestas para la creación de diez aparcamientos disuasorios durante los próximos años son Pitis, Estadio Olímpico, Santa Eugenia, San Cristóbal, Villaverde Alto, Cuatro Vientos, Aviación Española, Colonia Jardín, Fuente de la Mora y Canillejas (las dos últimas pertenecientes al distrito de Hortaleza), cuyo importe previsto, inicialmente, será superior a los 78 millones de euros.
La selección de estos puntos se ha realizado tras estudiar en profundidad el área metropolitana de Madrid y otras ciudades con sistemas similares de descongestión del tráfico (como París, Burdeos, Hamburgo, Múnich, Stuttgart, Londres, Bristol y Bilbao) en el marco de desarrollo del Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) de diciembre del 2014.
Tipología y ubicación
Los técnicos municipales han delimitado una serie de características comunes a estas propuestas: serán aparcamientos de no más de 500 plazas, situados en el exterior de la zona metropolitana y su uso siempre estará ligado al transporte colectivo (ubicados muy cerca de bocas de metro, paradas de autobuses o estaciones de cercanías), en cuyo caso, serán gratuitos o de bajo coste para el usuario. En total, habrá tres tipos de construcciones: en siete casos, en superficie; en dos, en altura, y, en una ubicación —coincidente con espacios destinados a zonas verdes—, bajo rasante.
Con respecto a su ubicación, los estudios realizados han demostrado que la mejor alternativa de aparcamiento disuasorio ante la congestión de tráfico en Madrid se encuentra fuera de la propia ciudad, por lo que se construirán o ampliarán infraestructuras ya existentes y que estén situadas en el entorno de la M-40 de Madrid, pero siempre en las inmediaciones del transporte colectivo.
De media, se situarán a unos 50 metros (un minutos a pie), a excepción del situado en Canillejas, que se encontrará a 200 metros de la estación de metro y de la zona de autobuses en la orilla de la Carretera de Barcelona que pertenece al distrito de Hortaleza.
A tal efecto, las distintas Administraciones Públicas implicadas están trabajando para articular medidas que incrementen los medios y la frecuencia de los transportes colectivos, así como para sobredimensionar los accesos viarios a los futuros aparcamientos de cara a facilitar los accesos y el estacionamiento en los aparcamientos disuasorios.
Régimen tarifario
Los aparcamientos dispondrán de tarifas bonificadas, que podrán llegar incluso a la gratuidad, siempre que su uso se produzca de forma disuasoria, es decir, se estacione en él para acceder a la red de transporte público colectivo. Además, se articularán sistemas de pago ágiles, cómodos y eficientes, incluyendo el pago mediante dispositivos electrónicos y aplicaciones de dispositivos móviles, que permitirán el control telemático del uso disuasorio (que se autorizará por un margen horario que no podrá exceder de 24 h).
El uso no disuasorio del aparcamiento se realizará conforme a las tarifas municipales, que, en su caso, podrán establecer recargos con el objetivo de asegurar el destino disuasorio de la infraestructura y evitar así el estacionamiento de los vehículos vinculados a los centros de trabajo, industriales y comerciales que pudiera haber en las proximidades. Para completar la gestión de la movilidad de estas diez ubicaciones, se estudiará la implantación de zonas de SER para asegurar a los residentes de las inmediaciones su posibilidad de estacionamiento en la vía pública.
Reserva ‘on-line’ de plaza de aparcamiento
El consistorio no se limitará a construir estos diez aparcamientos disuasorios, sino que los acompañará de innovaciones técnicas que faciliten la información a tiempo real sobre la disponibilidad de plazas, el tiempo estimado hasta el aparcamiento y el trayecto más rápido, el tiempo de espera estimado del transporte público, etc.
Dicha información estará disponible in situ a través de paneles informativos en vías cercanas y también se desarrollarán aplicaciones de software y sistemas informáticos para acceder a ella e, incluso, para reservar plazas. Además, toda la información de interés público asociada a estos espacios (grado de ocupación instantánea, situación general del tráfico y restricciones) se abrirá en tiempo real en el portal de datos abiertos del Ayuntamiento de Madrid.
Colaboración con instituciones e información pública
El Área de Gobierno de Medio Ambiente y Movilidad ha compartido este proyecto con los distritos en los que planea ubicar los aparcamientos, con el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), Renfe Cercanías y otros agentes para pedirles comentarios o propuestas sobre la iniciativa. Por último, se abrirá un periodo de información pública para que aquellas vecinas y vecinos, asociaciones y colectivos que así lo consideren puedan hacer llegar sus propuestas y participar en este Programa de Aparcamientos Disuasorios Municipales, que pretende ayudar de forma importante a la reducción de la congestión de la ciudad.