El pasado mes de octubre, el Pleno del distrito aprobó una proposición para seguir avanzando en la recuperación de la memoria histórica de Hortaleza.
La iniciativa, que fue apoyada por PSOE y Ahora Madrid, rechazada por el PP y con la abstención de Ciudadanos, contempla, por un lado, la designación de nuevos espacios públicos con los nombres de cinco alcaldes republicanos del antiguo municipio entre 1931 y 1939: Rafael Ortega López; Jonás Aragoneses Molpeceres; Andrés Molpeceres Barceló; Victoriano Elipe Sánchez y Ángel Martínez Lorenzo. También prevé la colocación de una placa conmemorativa en la Junta Municipal con el nombre de los ediles de Hortaleza y Canillas democráticamente elegidos durante el periodo de la Segunda República.
Sin embargo, las negociaciones para sacar adelante este proyecto se han dilatado durante años. Ramón Silva, concejal del PSOE, recuerda que ya en 2010 (cuando el PP gobernaba con mayoría absoluta), su grupo llevó al Pleno de la Junta la propuesta sobre el cambio de la nomenclatura del callejero, aunque no salió adelante por falta de acuerdos. “Lo que tenemos pendiente es el reconocimiento a unas víctimas de un bando, que era el bando republicano, que nunca tuvieron los reconocimientos”, expuso Silva durante la sesión del Pleno de octubre.
Jonás Aragoneses, alcalde republicano de Hortaleza, entrevistado por José Luis López en 1977. Foto F. Ugarte.
No obstante, el concejal socialista reconoce que todavía queda mucho por avanzar: “Es necesario crear una Comisión de la Verdad, hace falta verdad, justicia y reparación”. Una denuncia que también comparten organizaciones internacionales como Naciones Unidas o Amnistía Internacional quienes, en repetidas ocasiones y desde hace años, han condenado al Estado español por garantizar la impunidad de los crímenes del franquismo y de la Guerra Civil.
REALIDADES PARALELAS
A pesar de las continuadas denuncias y advertencias por parte de los organismos defensores de los Derechos Humanos, el franquismo y su simbología siguen presentes en las calles del distrito y de la ciudad. En noviembre se ha dado la paradoja de que, mientras en Hortaleza se aprobaba el reconocimiento a los alcaldes republicanos, un juzgado madrileño ha suspendido, cautelarmente, el acuerdo del Gobierno municipal por el que se cambiaba el nombre de 52 calles con reminiscencias franquistas de la capital, y que cuenta con los votos a favor de Ahora Madrid, Partido Socialista y Ciudadanos.
La decisión ha llegado tras el recurso interpuesto por la Fundación Nacional Francisco Franco por considerarlo un acuerdo “sectario, revanchista y de carácter marcadamente ideologizante”, aunque la suspensión ha quedado condicionada a que la Fundación abone 60.000 euros como garantía. Días después y de forma paralela, la Asociación por la Recuperación de la Memoria Histórica entregó al Congreso de los Diputados 218.600 firmas para reclamar a los partidos la ilegalización de la Fundación Francisco Franco.
UNA GUERRA QUE NO TERMINA
Con todo, los acontecimientos de los últimos dos meses reflejan la falta de consenso y lo lejos que todavía queda la posibilidad de saldar la deuda con nuestra historia. Una perpetua disputa que también se escenificó en el Pleno del Ayuntamiento del pasado octubre, cuando el concejal popular Pedro Corral se hizo eco de las acusaciones vertidas contra el alcalde de Hortaleza Victoriano Elipe, que fue fusilado por la dictadura, en la “Causa General” elaborada por el franquismo por su presunta participación en la checa hortalina durante los años de Guerra Civil.
A estas acusaciones se unió el portavoz popular del Ayuntamiento de Madrid, José Luis Martínez Almeida, que calificó de “asesino” al antiguo alcalde, a lo que el edil socialista Ramón Silva respondió: “Si él era un asesino, tú eres un fascista”.
No obstante, Silva ha aclarado que la polémica quedó zanjada cuando Martínez Almeida se excusó personalmente por sus palabras. Días antes, el portavoz de los populares ya había despertado resonadas polémicas cuando afirmó que las iniciativas del Ayuntamiento de Madrid de presentar querellas contra los crímenes del franquismo eran “cosas que no interesan a nadie”.
MONUMENTO PENDIENTE
Aunque puede parecer que en Hortaleza el ambiente está más sosegado que en el corazón de la ciudad, lo cierto es que todavía queda pendiente un elemento de futura discordia: la colocación de un monumento a las víctimas del franquismo en la plaza de Chabuca Granda, en el casco antiguo del distrito. El proyecto, aprobado el año pasado con los votos favorables de Ahora Madrid y PSOE, y promovido por el vecino Luis Seisdedos, ha sido considerado por la concejala popular Inmaculada Sanz como muy “triste” y una propuesta “sectaria” por “reabrir heridas”.
