Hortalina de toda la vida, empezó a participar en el tejido asociativo del barrio a finales de los años 90. “Éramos una especie de club de debates, el KLL, Kolectivo Los Lunes. No teníamos local físico y Lino, que estaba en La Unión de Hortaleza, nos ofreció el espacio.” Con su participación en esta asociación vecinal, entró en contacto con la labor institucional y entendió que había que reivindicar otro tipo de gestión.
Así, cuando se produjo todo el movimiento que desembocó en la candidatura de confluencia Ahora Madrid, le pareció que era el momento de dar el paso y aportar en la construcción del municipalismo. Y no era la única que lo pensaba, pues fue la persona más votada en las primarias para escoger a los vocales vecinos del distrito y nombrada portavoz del grupo político en la Junta de Hortaleza.
PREGUNTA: ¿Por qué abandonas la portavocía de Ahora Madrid en la Junta después de solo 18 meses?
RESPUESTA: Porque el tiempo dedicado a la actividad del barrio siempre iba muy ajustado y hace falta seguir estando ahí porque no hay tantos relevos en la organización vecinal. Pero, en Ahora Madrid, sí está contemplado que la portavocía rote cada dos años.
Entonces, ¿te desvinculas completamente de la vida política?
Seguiré apoyando a Ahora Hortaleza y a las áreas con las que ya estaba vinculada. Solo voy a dejar de tener algunas obligaciones, así que podré dedicar más tiempo a seguir tejiendo fuerte desde abajo.
¿Cómo valoras tu experiencia en el ámbito institucional?
Muy positivamente porque he aprendido mucho sobre cómo funciona la Institución y creo que, ahora, tengo más capacidad para aportar en la construcción de un municipalismo diferente y fuerte.
¿Por qué Ahora Madrid mantiene, a pesar del rechazo vecinal, el proyecto de ArteFacto en Valdebebas?
Porque hace falta vivienda pública en el barrio y, cuando se pensó en este tipo de construcción, con una parte dotacional y ecológicamente sostenible, la parcela que mejor daba esas características era esta. Y el único planteamiento real que se hace es que la parcela podría costar muchos millones si se vendiera.
¿Existen otras fórmulas para que el Ayuntamiento adquiera vivienda pública?
Solo hay dos opciones: comprar vivienda privada o construir. A mí me gustaría más que se reutilizara vivienda ya construida. Por ejemplo, en el barrio, hay 5.500 viviendas vacías.
Estamos llegando a un tipo de sociedad en el que el bienestar de una persona y que pueda vivir donde tiene sus raíces están por debajo del interés económico de otra
¿Por qué muchos jóvenes y familias arraigadas en el barrio no pueden permitirse vivir en él?
La burbuja inmobiliaria. Es algo que se veía venir porque el barrio está muy bien situado y es una zona norte con mucho arbolado. Esta subida de los precios de la vivienda y de los alquileres se está sufriendo especialmente en Parque de Santa María. Se ha introducido la compra de muchas de las viviendas por un fondo de inversión, y los vecinos nos enfrentamos a subidas de alquiler insostenibles para nuestros salarios.
¿Existe un proceso de gentrificación en el barrio?
Y de hecho se nota. Está llegando gente con más poder adquisitivo, y bienvenidos sean, pero no a costa de que nos vayamos los que ya vivimos aquí. Además, son personas que no tienen esa idea de hacer barrio, sino de un lugar donde se viene a dormir o a hacer alguna fiesta con sus amigos en casa.
Como miembro del Grupo de Alquiladas de La Unión de Hortaleza y vecina de Parque de Santa María, ¿cómo es de grave la situación?
Hay un problema muy importante de vivienda en el barrio. Estamos llegando a un tipo de sociedad en el que el bienestar de una persona y que pueda vivir donde tiene sus raíces están por debajo del interés económico de otra.
¿Hay familias que han tenido que abandonar su casa por no poder hacer frente a la subida de sus alquileres?
Sí, ya hay gente que ha tenido que irse o mudarse a un piso más pequeño, sin reformar o sin calefacción. Ahora, están llegando más cartas de subidas o de no renovación y estamos trabajando con ellas. También nos reunimos con la concejala del distrito y le dimos casos concretos de familias con mayor riesgo de vulnerabilidad, y van a intentar trabajar con Servicios Sociales.
¿Qué otras actuaciones está llevando a cabo el Grupo de Alquiladas de La Unión de Hortaleza?
Nos reunimos cada dos domingos a las 12 en la asociación (Santa Susana, 55). Apoyamos la iniciativa legislativa popular (ILP) por la vivienda pública. Seguimos presionando para que los contratos de alquiler se renueven otros 3 años en las mismas condiciones y también nos estamos vinculando al sindicato de inquilinas que se está creando en Madrid.
¿Descartas volver a la portavocía?
Si de aquí a unos años me vuelve a tocar, porque falta gente o no hay motivación, pues a lo mejor sí. Pero, en principio, la idea es que ahora le toca a otra persona, que somos muchas y todas tenemos que aportar y construir.
